Tuesday, September 26, 2006

Dejar Atrás


Que lata dejar atrás, no me gusta, más aún cuando me dejan atrás.
Prefiero llevar las cosas buenas y malas conmigo, atesorarlas como lo que fueron.
He descubierto que no me gusta el rechazo, bueno, no creo que haya alguien tan masoquista como para que le guste, pero yo ni siquiera lo acepto. No lo tolero, me pone mal, me entristece, me da rabia porque tampoco creo en el rencor.
Es que uno trata de hacer las cosas de buena fe y sin malas intenciones, entonces sentir el rechazo es sentir que fuiste malo que provocaste daño y eso no me deja estar en paz, pues he tratado de dar todo lo que he podido dar, pero aún así no fue suficiente.
A veces hay que elegir, costo-beneficio le llaman los analistas, perder o perder le digo yo, por que nunca puedes tener todo lo que quieres, siempre debes optar, y en esa elección pierdes cosas importantes.
Que el tiempo cura todo escribió alguien por ahí... yo no quiero esperar, no me gusta sentirme así, rechazado.